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En Octubre pasado se llevó a cabo, en 23 jornadas, la caravana " A 90 años del 100.000". De ella participaron varios vehículos que fueron tomando la posta, etapa tras etapa, pero hubo uno, el de Hector Gentile, que completó los 4.600 kilómetros que totalizaba toda la caravana.

Felicitaciones Hector!!!.

Aquí, la historia contada por su protagonista:

Una noche revisando los mails me sorprendió el asunto de unos de ellos que decía “Caravana Ford T”, al principio no entendía de qué se trataba.....

pero sabía que quería participar. Yo tenia el Ford T para acondicionar, sabia que debía ponerlo en condiciones, cuando empecé a querer acondicionarlo me encontré con la sorpresa de que tenia que cambiar la corona de arranque, para la cual debía desarmar el motor completo. Esto lo realice en los primeros días de Septiembre, una vez que el motor estuvo en optimas condiciones lo lleve a rectificar para que tuviera la habilitación para poder participar de la travesía, este desafío no fue solo por el recorrido del Ford t sigo que se sumo además uno personal, ya que en los meses anteriores me habían detectado un problema de salud (cáncer) y en ese momento estaba realizándome un tratamiento que requería que viaje 3 veces por semana a capital, que me dejaba en condiciones de agotamiento físico; pero lo que realmente me motivaba a afrontar este estado era el deseo de poder participar de la caravana. En el transcurso del tiempo de preparación del Ford t surgieron también otros inconvenientes de repuestos y armado de la camioneta y la casa rodante, que fueron los vehículos que me acompañaron en la travesía.

Cabe resaltar que esto no lo hubiera logrado sin el apoyo y acompañamiento incondicional de mi cuñado Irigoyen Juan Carlos y mi amigo Gustavo Morrelli. Además estuvieron acompañando mi hermana Adriana y mi amigo Santucho, considero que este fue también uno de los factores por los cuales pudimos finalizar la travesía. Gustavo fue el que me dio el empuje y el aliento para que esta “locura” sea posible de realizar ya que dos días antes a la salida de la caravana el motor del Ford t no funcionaba bien por que se habían agarrado los pistones, debo reconocer que en ese momento quise abandonar este desafío en el cual había trabajado arduamente algunos días quedándome hasta las 23 hs. Gracias al apoyo incondicional de mis compañeros pude meditar y analizar que no debía abandonar, esa noche encontramos el problema cuando lo desarmamos y pudimos corregirlo. El domingo armamos y dejamos en funcionamiento el Ford t .

El lunes, comenzó la travesía, partimos de Zarate a la Ford de Pacheco, en donde se dio el inicio al recorrido, luego partimos a}rumbo a la Ford de Pilar con Claudio, luego a Pergamino, llegando a las 14:00 hs en donde nos recibieron con una reunión y comida, estuvimos sacándonos fotos con los vecinos que se acercaban a saludarnos. Seguimos viaje hasta Rosario, en donde la ruta muy ondulada parecía que estábamos corriendo por un rally, pero pudimos llegar. Una vez en Rosario nos encontramos con los uruguayos, de floresta y Mercedes, fuimos hasta el monumento a la Bandera en donde tomamos varias fotos. Por ultimo ese día fuimos con Claudio hasta San Lorenzo, hasta una estación de YPF. Culminamos nuestro primer día de caravana cenando todos juntos, en donde coordinamos los detalles para el próximo día. A la mañana partimos todos para Santa Fe, estuvimos paseando por la costanera, y la Iglesia de Guadalupe, sacando fotos y saludando y explicando de la travesía a los vecinos que se acercaban. Fuimos a la agencia de Ford de Santa Fe .

El segundo día salimos de Sunchales a Villa María el camino se dificulto un poco por que anteriormente le había cambiado las cubiertas y llantas, y esto generaba que con la sensación de andar saltando como canguros por la ruta, para disminuir este mal andar se le bajo la presión a los neumáticos, una vez que llegamos a Villa María fuimos a la empresa Ford, en donde nos recibieron muy gentilmente y colaboraron con el proyecto de la caravana Ford T. también agradecemos infinitamente a la familia (Carmevale) que nos agasajó con una hermosa cena y reunión.

Al día siguiente partimos para Río cuarto donde nos recibió un grupo de fierreros, en el cual me asombre de ver a uno de los integrantes que iba con su Ford t a los 92 años de edad manejando su Ford t que vale destacar que estaba en muy buenas condiciones. Compartimos una grata reunión con estos compañeros y amigos. Luego salimos hacia la carlota, en donde por un error del GPS me mando por otro camino en donde en vez de hacer 80 km tuvimos que hacer 220km, cuando nos dimos cuenta ya estábamos encaminados, por suerte los muchachos del club me esperaron esas dos horas que tardamos de mas y cuando llegamos nos recibieron amablemente y pasamos un muy grato momento, acompañados por otros Ford picamos algo entre compañeros y nos ayudaron con la colaboración de combustible. Luego partimos hacia Rufino, con varios Ford t que nos acompañaron durante unos 10 km. En Rufino, nos esperaba un gran amigo que amablemente nos recibió en su casa dándonos hospedaje, también nos prestaron un taller en donde estuvimos acomodando algunos desperfectos de las llantas y ruedas en lo cual nos demoramos un día en realizar estas reparaciones. Se acercaron varios colegas que me contaron sus anécdotas mientras solucionamos el problema de la ruedas.

Solucionado el problema salimos hacia Junín, cuando llegamos nos esperaba un grupo de gente y “Pepe” de Salto (siempre firme alentándome) compartimos unos mates y fotos y seguimos camino para Intendente Alvear (la Pampa) parando a descansar en Lincoln en donde también nos recibieron muy amablemente, seguimos camino hasta el pueblo General Villegas donde recorrimos lo que quedo de la instalación de la agencia Ford, sacamos fotos y continuamos el recorrido para llegar finalmente a Alvear en donde nos estaban esperando Carlos Trovar que fue quien nos guió por el pueblo y el hotel, a la noche compartimos cena y las historias del Wobron y la restauración de ese auto junto con el entusiasmo del pueblo .

Al día siguiente se sumo a la caravana del Ford T Nelson y nos reunimos en la casa de Carlos Crova almorzando un asado mientras compartíamos un grato momento.

El próximo día el camino que hicimos fue hasta América pasando por una agencia en donde reproducimos una foto de la época junto con otros Ford T, seguimos viaje hasta llegar a Trenque Lauquen en donde nos esperaban otros colegas.

Seguimos hasta Coronel Suarez, en donde nos recibieron con sus autos antiguos y nos acompañaron hasta a recorrer el pueblo paramos en una exposición e hicimos estática, almorzamos y seguimos viaje para Pigue, ahí nos hospedamos en hotel La cumbre donde el dueño nos cedió el lugar y nos atendió muy amablemente, con una humildad y sencillez que nos dejo asombrado.

Compartimos la cena y en la mañana siguiente Nelson, se puso a arreglar su Ford T, la cinta de la marcha atrás, y me dijo si no me animaba a ayudarlo , yo de corajudo como siempre, le saco una arandela y cuando voy a colocarlas siento un golpe y vemos que se cayo el resorte del mismo, “me quería matar”, intentamos pescarlo con un gancho pero no hubo respuesta favorable, así que tuvimos que desarmar la taja de caja o trompa agarrar el resorte y volverlo a armar. Una vez solucionado el problema salimos al mediodía con destino a Bahía Blanca, faltando unos kilómetros percibo que no tenía buena lubricación y con saturación de aceite para poder seguir. Llegando a Bahía nos esperaban unos colegas y fierreros que nos guiaron hasta el hotel y el teatro para repetir una foto que había sido en la época del Ford T, la verdad es que la foto salió muy bien, era como volver el tiempo atrás. Debido al inconveniente del aceite teníamos que reparar el auto para poder seguir, por suerte contamos con la hospitalidad de Cesar que nos ofreció el taller para que podamos hacer la reparación. Analizando el andar del Ford T veo que tenia que desarmar la tapa de caja o trompa chancho, entre risas comentaba que mi Ford T se había puesto celoso por que había arreglado a otro Ford T, así que me toco desarmar y reparar lo mismo dos veces en distintos autos en un día, con la ayuda de Nelson y mi cuñado lo solucionamos, para luego irnos a cenar a la casa de Jaime Nos hospedamos en el taller que muy amablemente nos presto Cesar Radiadores, y al día siguiente partimos para Coronel Dorrego, Coronel Pringles con un tiempo que no nos acompaño, lluvias torrenciales, pudimos llegar hasta Lamadrid ahí nos esperaban unos amigos que nos acompañaron hasta el pueblo donde hicimos estática y mas tarde nos dieron un lugar para quedarnos en el cuartel de bomberos voluntarios del pueblo, en donde también cenamos con los compañeros .

MapaEn la mañana del día siguiente tuvimos un hecho de inseguridad en la casa de mi hermana que estaba en la travesía con nosotros. Por este motivo ellos se tuvieron que volver con la camioneta y la casa rodante. Cargamos las herramientas y valija mas necesarios y seguimos solos con mi compañero santucho hasta Tandil, en donde nos encontramos con mi amigo Gustavo que dejo sus obligaciones para hacernos el aguante en esta travesía, que como vengo detallando fue bastante accidentada, pero gracias al apoyo incondicional de Gustavo y los compañeros de viaje y colegas que nos fuimos haciendo en el pueblo pudimos sobrellevarlas y seguir adelante seguimos hasta Benítez Juárez, el camino fue bastante complicado debido a los fuertes vientos que llegaban hasta 80 km X hora, donde se hizo bastante difícil controlar el manejo.

Al día siguiente salimos para Tres Arroyos donde nos esperaban un grupo de fierreros haciendo estática en la plaza principal, donde luego pasamos por la casa de un colega viendo las maquetas echas en la puerta y en la entrada (ver foto) quede muy asombrado por la obra del fordista. Luego salimos para Necochea sacamos fotos en la playa y en el puente colgante donde por el supuesto raid ha pasado el coche en balsa. Luego salimos para Nicanor Otamendi en el llegamos e noche y un amigo nos llevo a un galpón y allí nos enteramos que fue la agencia Ford en 1925, sorprendiéndonos la estructura de la época. Saliendo para Mar del Plata nos encontramos con Jorge Rubiolo, Alicia y un grupo de amigos con sus Ford que nos acompañaron a la agencia Ford Simione, en cual tuvimos un buen recibimiento y elogios de las personas y para mi asombro se encontraba el hijo de Fangio, otras autoridades y periodistas.

Después de veinte días de circular en caravana, nos tomamos tres días para estar en familia por el día de la madre. Retomamos el día 20 de octubre sumándose Jacinto Druetto y Alfredo Civalero rumbo a Chascomus por ruta 2 el asombro de la gente fue constante y al llegar a la laguna y recorriendo la ciudad hasta la llegada de la cena en el hotel y largas charlas de autos. Al día siguiente salimos para La plata y luego hacia La Boca, siendo el antiguo galpón donde se ensamblan los primeros Ford T (en cual nació el mío).

Fin del Raid con la satisfacción de cumplir un sueño más, agradeciendo a todos los que hicieron posible, no quisiera olvidarme de nadie, pero muchos mas estuvieron y están en mi memoria en cual las emociones me cuestan recordar!!! 

 

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